viernes, 25 de octubre de 2019

EN INCENDIOS COMO EL DE JABE NIBUE LA PREVENCIÓN HUBIERA AHORRADO VEINTE MIL MILLONES EN PÉRDIDAS


PAVOROSO INCENDIO ACABÓ CON EL HOTEL JABA NIBUE “MADRE MAR” EN BAHÍA DE PLAYA GRANDE EN TAGANGA

foto El Informador

Otra vez, en lo que a incendios estructurales se refiere, y en América Latina o Centro América,  es un lugar común levantar  edificaciones como hoteles suntuosos, edificios increíbles, pero a la hora de pensar en  su seguridad, si los códigos de construcción no lo obligan con multas de por medio, resulta ser el rubro más sacrificado. Lo increíble es que se invierten grandes sumas de dinero para que estas construcciones en su diseño arquitectónico sean atractivas y llamativas a la vista de todos y principalmente para aquellos que las van a disfrutar, pero  adolecen por completo de lo vital en lo atinente a prevención y  seguridad. Sin  instalaciones adecuadas de redes contra incendio, porque invertir en estos sistemas de protección incrementa los costos que algunos constructores o propietarios no están dispuestos a asumir.

Siempre se cree que jamás va a ocurrir un percance de tal naturaleza. Pero, ¡eso sí!  Si, por ejemplo, es un hotel, como en este caso, o cualquier otro tipo de edificación dedicada a  vivienda, se espera produzca los frutos de  rentabilidad anhelados. Es en este punto, antes de su construcción, dicen los ingenieros de obra –en el diseño de los planos-, donde se debería tener claro cuál es la seguridad que deben implementar.

Colombia, por ejemplo, en los últimos años expidió la Ley 1796 del 13 de Julio de 2016 dirigida a que se incremente la seguridad en los inmuebles y asimismo proteger al comprador de vivienda. Que las nuevas edificaciones que se construyan en el país cuenten con la reglamentación más rigurosa posible, donde haya un mayor control a la hora de elaborar y revisar diseños, en la expedición de licencias y en la supervisión de cada una de las obras habitacionales…

¡APAGANDO CON BALDES!



Pudimos conocer por declaraciones hechas a distintos medios que los propietarios del eco resort,  en una acción desesperada por salvar el complejo del voraz incendio, se lanzaron a hacerlo con simples ¡baldados de agua! Como si el inesperado ejercicio bastara para controlarlo, cuando se trataba de una estructura –quioscos- totalmente inflamables de madera, paja y  palma seca. 40 de las 44 cabañas quedaron a merced de las llamas. “Gracias a Dios, no hubo víctimas que lamentar”, decían los desprevenidos espectadores.

En las redes sociales la gente opinaba que, ¿cómo era posible que se permitiera la construcción de  hoteles –cuatro estrellas- con materiales tan propensos a atizar el fuego y sin características anti ignífugas, sin siquiera implementar primero sistemas contra incendios que los protejan?  Todavía, ¡hay más! Otras personas protestaban preguntándose por qué se permitía se edificaran hoteles y carreteras en lugares considerados parques naturales, donde está prohibido hacerlo y el Plan de Ordenamiento Territorial en un acuerdo citado en el artículo 433 lo consigna así.

Según el Diario El Informador del Magdalena, Santa Marta, en el artículo “Siguen las investigaciones por incendio en  Jaba Nibue”, uno de sus textos dice: “El hecho que puso en alerta a diferentes sectores del comercio de la ciudad, ha abierto el debate sobre las medidas preventivas que adoptan este tipo de establecimientos para la prevención de situaciones de esta envergadura.

“Por su parte, Carlos Javier Campo López, experto en prevención y seguridad, y quien habría participado en la construcción del complejo hotelero, aseguró en una entrevista hecha por Fuego Noticias de la emisora Fuego Stereo, dijo que: “en el momento en que el hotel se construyó, lo primero que notamos por ser un hotel tipo hostal en madera, las recomendaciones eran que tenía que tener una excelente red contra incendios, pero no pudimos construirlo por situaciones económicas, que no permitieron la instalación de una turbina sumergible en el mar, que eran nuestras recomendaciones porqué el lugar no cuenta con agua potable, y eso hacia evidente la posibilidad de que se presentara un caso así”, puntualizó Campo Lopéz”.

MÁQUINAS BOMBERILES NO PUDIERON ACCEDER



Pero el incendio surge en cualquier momento y el hotel Jabe Nibue no fue la excepción. Dada su empinada ubicación no permitió el ingreso y acceso de los vehículos de bomberos. ¿Qué debieron hacer? Como lo dio a conocer  a los medios de comunicación el Capitán José Chaín de Bomberos Santa Marta, gracias a los guardacostas, se pudo trasladar personal y equipo por vía marítima, y con bombas y mangueras aprovisionarse de agua de las piscinas del mismo hotel para confinarlo.

Las autoridades investigan las causas de la conflagración. Se piensa que pudo haber sido una colilla de cigarrillo encendida, un corto circuito, un rayo, o quizás pudo ser intencional. Se estima que las pérdidas económicas ascienden a veinte mil millones de pesos.

Por corresponsal Carlos Gallo M.




No hay comentarios:

Publicar un comentario